BioMed

El avance de la nano-medicina en los últimos años ha sido asombroso. Operaciones muy complejas que demoraban horas y resultaban extremadamente costosas ahora pueden realizarse en una menor cantidad de tiempo y a un precio más accesible. Dentro del desarrollo de éstas tecnologías, la ingeniería juega un papel importante, ya que son los ingenieros los que, en conjunto con expertos en medicina, generan equipos, herramientas, etc., que facilitan la intervención del médico y proporcionan mayor seguridad logrando una cirugía más eficaz e incluso una mejor recuperación para el paciente. Comencemos por uno de los aportes básicos en el uso de biomateriales; Las nanopartículas y los nanotubos de carbono. Las nanopartículas son una nueva clase de materiales, aunque han existido en el planeta durante siglos. Algunas de las civilizaciones antiguas los aprovechaban sus propiedades ópticas y medicinales. Como el caso de la cultura egipcia, que utilizaba las nanopartículas

En 1959 el Dr. Richard Feynman hace la primera mención sobre la nanotecnología. “There’s Plenty of Room at the Bottom”; permite la manipulación de átomos y moléculas en forma individual, a través de instrumentos de gran precisión y de esta forma se podrían diseñar y construir sistemas en la nano-escala; 10 años después  un científico, el Dr. Norio Taniguchi utilizó por primera vez el termino “nanotecnología” para describir sus investigaciones. Dentro de estas décadas, la nanotecnología seguía sin generar el impacto necesario para llamar la atención de científicos y era debido a los pocos descubrimientos y la baja tecnología requerida para realizarlos. Fue hasta la década de 1980, con el descubrimiento de los microscopios de fuerza atómica, se pudo manipular por primera vez los átomos de forma voluntaria y permitió diferenciar las estructuras dentro de un compuesto a nivel atómico. - Para darnos una idea de la escala denominada nano se considera que es un metro por 10