Argumentación

El avance de la nano-medicina en los últimos años ha sido asombroso. Operaciones muy complejas que demoraban horas y resultaban extremadamente costosas ahora pueden realizarse en una menor cantidad de tiempo y a un precio más accesible. Dentro del desarrollo de éstas tecnologías, la ingeniería juega un papel importante, ya que son los ingenieros los que, en conjunto con expertos en medicina, generan equipos, herramientas, etc., que facilitan la intervención del médico y proporcionan mayor seguridad logrando una cirugía más eficaz e incluso una mejor recuperación para el paciente.

Comencemos por uno de los aportes básicos en el uso de biomateriales; Las nanopartículas y los nanotubos de carbono.

Las nanopartículas son una nueva clase de materiales, aunque han existido en el planeta durante siglos. Algunas de las civilizaciones antiguas los aprovechaban sus propiedades ópticas y medicinales. Como el caso de la cultura egipcia, que utilizaba las nanopartículas de oro como coloides medicinales para conservar la juventud y mantener buena salud.

Actualmente las nanopartículas son necesarias para la creación de Gasas. Estas gasas son utilizadas para quemadas o heridas crónicas. Contienen nanopartículas de plata. ¿Por qué la plata? Bueno, la plata es un bactericida y en forma de nanoparticula incrementa su área superficial mejorando la eficiencia antibacteriana.




Piel Artificial

Investigadores del Instituto de Tecnología de California, Estados Unidos, y de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, Suiza, crearon una piel artificial para que robots o personas que cuentan con prótesis puedan volver a tener sentido del tacto y poder detectar los cambios de temperatura.

Para el desarrollo de esta tecnología, se inspiraron en el mecanismo utilizado por las víboras, con las que son capaces de detectar a sus presas.

Los investigadores fabricaron una película delgada y flexible utilizando la pectina (una molécula de cadena larga presente en las células de plantas) y la mezclaron con agua. Cuenta con espesor de 20 micrómetros, se puede comparar en dimensión con el grosor de un cabello.